viernes, 25 de septiembre de 2015

Observando obsesiones

A lo largo de los años, vamos conociendo mucha gente, en situaciones totalmente distintas, y vamos observando que todos son absolutamente diferentes pero a la vez tienen algo en común.... alguna obsesión (y en algunos casos varias obsesiones): 

- Sino contame, cuando, no te cruzaste con esas personas obsesionadas por el orden, que no pueden ver nada fuera de su lugar al que fue asignado al momento de llegar. Están los leves, que solo quieren ver todo ordenado y despejado a la vista, y los más agudos, los cuales tienen todas sus cosas en un lugar particular, casi en una coordenada definida en el mundo y hasta con un sentido de orientación. El florerito, 10 centímetros de distancia del lado derecho de la mesa, justo arriba del caminito, que está levemente inclinado, para que no parezca tan obsesivamente prolijo. La lechucita del mueble siempre mirando al frente, ni un centímetro menos, ni un centímetro más mirando para otro lado. El orden puede ser solo a la vista, o incluso para cosas que no están a la vista, como por ejemplo dentro de la billetera.... todos los billetes acomodados para el mismo lado, ordenados de mayor a menor por el monto. Y por qué no ordenar las latas de conserva como un buen repositor de supermercado, etiquetitas mirando al frente, y por fecha de vencimiento.. atrás las que vencen más adelante, adelante las que vencen a la brevedad.

- O tal vez te cruzaste con el limpio. Todo tiene que estar reluciente, brillante, con rico perfumito. Pisos sin huellas, bañeras sin gotas de agua, bachas sin salpicaduras, espejos pulcros. Jamás aceptaran entrar a un baño que se encuentre húmedo por haber sido utilizado hace minutos. Jamás aceptaran esas huellas de zapatos mojados, y ni hablar si pisamos barro por ejemplo, puede ser una catástrofe. Si es posible, nos harán caminar con los famosos "patines" para no ensuciar los pisos encerados. Jamás podrás comer una galletita, sin poner tu mano abajo para juntar las migas que podrían caer. Espiaran disimuladamente los muebles y levantaran los objetos para ver si existe alguna aureola que indique que es momentos de pasar una buena franela para eliminar el polvo. 

- Algunos no aceptan ver muebles, cajones, puertas abiertas, tal vez porque a la vista queda desordenado, o tal vez porque quieren "ocultar su interior"... esto es carne de diván. La cuestión es que si abriste un cajón, debes cerrarlo al menos en los próximos 10 segundos después de que hayas sacado o guardado lo que necesitabas, caso contrario, vendrá el obsesivo y lo cerrará, levemente si no tiene confianza y bruscamente si son bien conocidos, para que te quede claro que eso no le gustó. 

- Ropa perfectamente acomodada, camisas colgadas, con sus cuellos mirando para el mismo lado, con las perchas colgadas para el mismo lado, y si es posible en degradé de colores. Lo mismo las remeras, perfectamente apiladas, colores oscuros abajo, colores claros arriba. Imposible que no se de cuenta que intentaste usarle algo y se lo ocultaste!!! 

Y así podríamos seguir describiendo, pero vamos a dejarlo para alguna otra historia!.

Lo importante, es aprender a convivir con estas obsesiones, mientras no molestemos al resto y nosotros seamos felices, no hay de que preocuparse!!! 

2 comentarios: